Hace años Walter se obsesionó con una antigua fotografía de un joven al que no conocía. Había aparecido misteriosamente en la casa de su madre, ella lo había heredado de su padre, Emilio. Walter miró al retrato y se preguntaba por qué tenía tanto magnetismo. Sólo la madre de Walter, María, sabía algo acerca del joven de la foto, la cual fue tomada en México en el siglo IXX. Su nombre era Práxedis Gilberto Guerrero, dijo. Es un personaje histórico, fue un patriota mejicano y un héroe revolucionario…
Práxedis dio la fotografía a Emilio cuando eran jóvenes. Eran muy buenos amigos. Emilio lo había guardado como oro en paño y lo tuvo en su baúl por muchas décadas. Walter preguntó a su madre si se podía llevar el retrato a su casa. La foto siguió en su mente por mucho tiempo. El hermoso rostro de la foto era convincente – era una fuente de conexión entre Walter y Emilio. Finalmente, se dio cuenta de que le estaban llamando para hacer un viaje al pasado, para descubrir los misterios sobre la vida del hombre al que quiso y perdió – Emilio. Walter se embarcó en una aventura que cambió su vida y reveló su futuro.